El viaje no comienza ni acaba cuando toman un avión, un tren o un barco, muchas veces con destino desconocido.
Por Omaira Beltrán Sánchez Tècnica en intervenció intercultural de Cáritas Diocesana de Barcelona
Se ha hablado mucho sobre la condición, que se prolonga en el tiempo, de las personas que realizan una migración.
Los inmigrantes son esos seres itinerantes que dejan atrás sus lugares de nacimiento y se establecen en otras ciudades, pueblos, barrios, en donde comienzan un proceso de aprendizaje con la comunidad de acogida. Ese aprendizaje se nutre del periplo migratorio. Quienes han vivido el proceso explican que el viaje no comienza ni acaba cuando toman un avión, un tren o un barco, muchas veces con destino desconocido. El viaje comienza cuando, al llegar, deben estudiar otras lenguas y entender otros códigos culturales que les permitirá relacionarse con la comunidad en la que crecerán sus hijos y establecerán sus familias.
Y este proceso genera muchas dudas: ¿Cuándo estas personas dejan de ser inmigrantes? ¿La comunidad de acogida también aprende de los nuevos vecinos? ¿En qué momento estos nuevos vecinos comienzan a formar parte de la sociedad en la que han decidido vivir?
Para contestarlas debemos adoptar una perspectiva intercultural. Debemos ir más allá de un simple respeto a los derechos culturales, sociales y económicos de una sociedad que cuenta con un gran porcentaje de diversidad. Evitar ver la diversidad como una riqueza que solo se nos muestra en sus representaciones folclóricas, como única vía para reconocer el valor de estas culturas que ya son parte activa de nuestra realidad.
Desde abril de 2021, y a través del Programa de Migración de Cáritas Barcelona, se ha introducido una nueva responsabilidad, que tiene como objetivo coordinar, acompañar y asesorar los proyectos y los equipos de Cáritas, velando para que los proyectos y las acciones que se llevan a cabo, tengan también en cuenta esta perspectiva intercultural.
Así, según el plan de acción de Cáritas Diocesana de Barcelona y de los Principios de Acción y Doctrina Social de la Iglesia, para conseguir iniciativas comunitarias comprometidas es necesario que éstas interactúen con las personas participantes de los proyectos las cuales, en gran parte, tienen orígenes culturales diversos. De esta manera, será posible que los principios de la interculturalidad, como por ejemplo la igualdad desde la equidad o el reconocimiento y la interacción positiva, se trabajen en estos espacios.
Los Espacios Polivalentes
Uno de los proyectos que han generado prácticas interculturales son los Espacios Polivalentes de Càritas Diocesana de Barcelona. Distribuidos en tres de las cinco zonas arciprestales, se caracterizan por promover los tres principios antes mencionados y tienen como objetivo generar conciencia de participación, para colaborar con el tejido asociativo que rodea el espacio polivalente, conectando con las redes comunitarias de los barrios y con las entidades que aspiran a cubrir necesidades similares. Además, evitan que se dupliquen las ofertas de servicios, que pueden dar respuesta a las necesidades cambiantes de las diferentes realidades sociales de cada zona arciprestal.
En esta línea, se han desarrollado acciones como la Semana Cultural en el Polivalente de Badalona donde, durante una semana del mes de junio del 2022, se llevaron a cabo tres actividades diseñadas por los mismos/as participantes del Polivalente. Donde la diversidad de lenguas y culturas extranjeras, el aprendizaje del catalán, los platos típicos y los bailes folclóricos se convirtieron en elementos unificadores en un espacio que, a menudo, crea un ambiente relacional y donde las participantes se encuentran como casa.
Acciones parecidas se han dado de manera natural en los Espacios Polivalentes de l’Hospitalet de Llobregat y de Singuerlín, en Santa Coloma de Gramenet, en Cataluña, centros que han sido el escenario de la celebración de la Iftar, o el final del Ramadán. En estos espacios, se celebraron las acciones interculturales como una actividad abierta al barrio y al resto de participantes, donde se pudieron compartir otras formas de vivir la espiritualidad, en este caso desde el Islam.
También han surgido iniciativas como las organizadas por las parroquias de Sant Joaquim, Sant Jaume y Cáritas Arciprestal de Santa Coloma de Gramenet. En este caso, se trató de un Cinefòrum Intercultural que, desde el mes de octubre de 2021 y hasta junio de 2022, ha programado la proyección de ocho películas con temáticas relacionadas con la migración y la necesidad del diálogo entre las diversas culturas. Al final de cada proyección se realizó un coloquio con una reflexión sobre el mensaje intercultural de los films y su aplicación en nuestras vidas.
Finalmente, constatar que se han realizado muchas actividades más, fieles todas ellas a los tres principios de la perspectiva intercultural, para construir Un “nosaltres” més gran (Un “nosotros” mayor) y para conseguir trabajar en un futuro próximo, en las Jornadas por la interacción entre las culturas, que durante el mes de enero y febrero de 2023 presentarán las diversas acciones interculturales realizadas en los últimos meses en diversas parroquias y espacios de Cáritas de Diocesana de Barcelona.
Última actualización: 19 de diciembre de 2022