El año 2020 h sido un año insólito en muchos aspectos. La llegada de la pandemia y la consecuente crisis social y sanitaria que ha generado, ha provocado que Cáritas Diocesana de Canarias haya tenido que reorganizar su trabajo para poder seguir dando respuesta a las personas más vulnerables. El Área de Empleo no ha sido una excepción y, a pesar de todas las dificultades de los inicios, se ha reinventado para seguir apostando por el fomento de la empleabilidad de las personas que atendemos.
En este período, marcado por la pandemia, el Área de Empleo ha seguido trabajando desde sus Servicios de Orientación Laboral, desarrollando itinerarios de inserción sociolaboral para las personas atendidas por el Área. También se ha continuado realizando contactos con empresas para la búsqueda de oportunidades laborales para las personas que acaban los cursos de formación puestos en marcha desde Cáritas. En un año en el que las tasas de desempleo se han disparado, celebramos que 108 personas atendidas desde los proyectos de empleo hayan conseguido trabajo.
Por otro lado, la apuesta por la formación complementaria y ocupacional se ha mantenido y, aunque ha tenido que reformularse para poder seguir ofreciéndose, se han logrado dar 22 cursos de los que se han beneficiado 247 personas.
Desde el Área de Empleo de Cáritas Diocesana de Canarias se sigue trabajando con ilusión por el derecho al empleo, porque detrás de todos estos datos hay personas con una historia que merecen una oportunidad.
