Celebramos cada año en todo el mundo el 20 de noviembre con el compromiso de sensibilizar sobre la necesidad de seguir luchando por el bienestar de los niños y niñas, en un momento donde todos los informes alarman sobre los niveles de desprotección que están alcanzando los menores en todo el mundo y, en los últimos años, también en España bajo la justificación de la crisis económica y el retroceso en el acceso a los derechos sociales.
Son los propios niños y niñas los que nos cuentan cuál es su cruda realidad por medio de los testimonios extraídos del informe de UNICEF “La infancia en España 2014”:
“Sí, creo que hay mucha pobreza infantil en España porque muchos niños pasan hambre, y pasan frío por no poder pagar facturas y tampoco pueden pagar comidas y eso significa que los niños se van [al colegio] sin desayunar”. Sandro, 12 años.
“Para mí, ser pobres es por ejemplo no poder ir a un colegio y pasártelo bien como todos los demás niños porque tú a lo mejor no puedes ir a excursiones donde te lo pasas bien y otros sí. Entonces tienes menos oportunidades”. Sandra, 10 años.
Desde Cáritas Diocesana de Canarias denunciamos esta situación y, trabajamos para crear unas condiciones más favorables para el desarrollo social del menor a través del fortalecimiento de las capacidades y potencialidades de las familias.
