El Secretariado Diocesano de Pastoral de Migraciones convocó este lunes 20 de junio a las 18.00 horas con motivo del ‘Día Mundial del Refugiado’ a las organizaciones y colectivos miembro de la Mesa Diocesana de Migraciones en la Diócesis de Canarias para realizar un «círculo de silencio» en la Plaza de Las Ranas de Las Palmas de Gran Canaria.
Unas 70 personas participaron en un acto simbólico organizado con los lemas «Hacia un nosotros cada vez más grande» y «Ninguna persona es ilegal» y que consistió en la lectura de unas reflexiones sobre la realidad de las personas refugiadas y desplazadas internas, 20 minutos de silencio, así como la reflexión y la lectura de un manifiesto con los siguiente puntos:
1. Más de 100 millones de personas han sido desplazadas por la fuerza en lo que va de 2022 debido a conflictos, violencia, el hambre, el deterioro medioambiental, violaciones de derechos humanos y persecuciones.
2. La acogida a las personas refugiadas es muy importante, pero no puede reducirse a un mero acto de buena voluntad.
3. Nos preocupa gravemente cómo, lejos de avanzar en el ejercicio de derechos ya reconocidos, vamos retrocediendo de una manera peligrosa en la práctica de los mismos.
4. Pedimos que se reconozca por derecho lo que ya es un hecho.
5. En España la tasa de reconocimiento de protección internacional, está en el 10,5%, muy lejos del 35% de la media europea.
6. El Papa Francisco no se cansa de urgirnos una y otra vez a construir “un nosotros cada vez más grande”. Ese “nosotros” incluye también a las sociedades y países que, aun muy distintos al nuestro, merecen que les incluyamos en el camino para ser “fratelli tutti” (todos hermanos).
Última actualización: 21 de junio de 2022