El 14 de julio de 2016 el Equipo de Formación y los Agentes de Cáritas Diocesana de Canarias, participantes en las Escuelas de La Caridad y de Verano, tuvieron un rico espacio de evaluación e intercambio de experiencias, poniendo así el broche final al proceso formativo confederal que se oferta cada año desde Cáritas Española.
Este año desde nuestra Diócesis han participado en las Escuelas un total de dieciocho personas tanto técnicas como voluntarias, siendo partícipes de un proceso formativo enriquecido con diversas temáticas entre las que destacamos:
– Los cursos de la Escuela de la Caridad donde nuestros agentes han estado distribuidos en los tres niveles ofertados: “El Servicio de la Caridad en un mundo globalizado”, “La intervención de la Comunidad ante la pobreza y la exclusión social” y “Los agentes y animadores de la caridad en la Comunidad Eclesial y en Cáritas en particular”.
– Los módulos de la Escuela de Verano a los que asistieron también tanto personas técnicas como voluntarias de nuestra Diócesis: “Comercio Justo y consumo responsable: el modelo de Cáritas”, “Migrantes con derechos: más allá de la llamada crisis de los refugiados”, “El silencio, la escucha y la palabra: claves para el encuentro, la acogida y el acompañamiento”, “Vencer la soledad de las personas mayores en las ciudades y en el mundo rural”, “En clave de R: La Renovación de los equipos de Voluntariado de Cáritas”, “La Salud emocional y mental, hacia un abordaje comunitario que reconozca la dignidad de las personas y sus capacidades”, “Resolución de conflictos con menores en situación de riesgo de exclusión social”, “Trabajar en equipo en Cáritas” y “La relación de ayuda en nuestro acompañamiento”.
De cada uno de estos espacios formativos, nuestros compañeros y compañeras nos han traído ideas y experiencias impregnadas de la Doctrina Social de la Iglesia, métodos y fórmulas de trabajo comunitario, ricas aportaciones de experiencias de otras Cáritas de diferentes lugares de España, claves teológicas aterrizadas en el ejercicio de la caridad, experiencias personales enriquecedoras… en definitiva, un valor en la mochila de cada uno/a, que afortunadamente comparten y compartirán en la tarea cotidiana de Cáritas Diocesana de Canarias.
Después de esto toca descansar, digerir y buscar espacios comunes en los equipos de trabajo para compartir y aplicar lo aprendido.
¡Muchas Gracias por las experiencias!
Última actualización: 1 de diciembre de 2020