Ocho personas se integran en el mercado de trabajo tras el curso de cocina clausurado en marzo

 

Geito ha clausurado dos acciones formativas importantes para favorecer el empleo y la cohesión social. El trabajo realizado por las personas participantes ya ha dado fruto, y ocho de ellas han podido, desde el primer momento, acceder al mercado de trabajo, y lo que es más importante, volver a tener esperanza en su futuro social y laboral.

 

Desde la apuesta que Cáritas Diocesana de Canarias hace por la formación para el Empleo, como uno de los ejes más decisivos para asegurar el avance de una sociedad, su capacidad de adaptación al cambio y la disponibilidad de oportunidades para el conjunto de las personas, el pasado 22 de marzo, el Programa de Empleo ponía fin en las instalaciones del centro de formación Geito,  a dos acciones formativas:

Por una parte la de “Operaciones básicas de cocina”   cofinanciada por el Fondo Social Europeo, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad e Ibercaja. Este curso tenía como finalidad favorecer la inserción sociolaboral de las personas  en riesgo de exclusión social. La acción formativa tuvo una duración de  222 horas, distribuidas en  Formación Complementaria (habilidades sociales, técnicas de búsqueda de empleo, manipulación de alimentos, prevención de riesgos laborales); Formación Transversal (sensibilización medioambiental; igualdad de oportunidades; alfabetización informática) y 150 horas de Formación Ocupacional Básica, que incluye prácticas en empresa. De esta forma, los participantes han tenido la oportunidad de darse a conocer como empleados potenciales para futuras contrataciones. Prueba de la efectividad del programa es que ocho personas fueron contratas.

La segunda acción formativa, “Cocina Doméstica”, ha sido cofinanciada por el  Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, y con una duración de 90 horas ha permitido mejorar las competencias profesionales de aquellas  personas que se dedican al empleo doméstico o al cuidado de personas dependientes.

Estas dos acciones formativas no solo deben ser entendidas como un instrumento para acceder al empleo, sino que, además, son un factor clave del crecimiento personal, social y económico que, mediante la innovación, favorecen el empleo sostenible y la cohesión social.

Es labor de Cáritas Diocesana de Canarias, favorecer e impartir una formación que permita a todas las personas instruirse de manera efectiva y conciliar el aprendizaje con otras responsabilidades y actividades, con el fin de responder debidamente a las exigencias crecientes de esta sociedad de cambio y, desde ahí, promover vías de formación flexible para el conjunto de la población, con opciones e itinerarios adaptados a las circunstancias variables y diferenciadas de los diversos grupos sociales.

 

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