Una treintena de personas se manifestaron hoy de forma silenciosa ante la sede de Presidencia del Gobierno para reivindicar los derechos de las trabajadoras del hogar, cuyo día internacional se celebró ayer domingo. El acto, en el que los y las participantes utilizaron una cadena de papel como símbolo de la realidad que viven muchas de las personas que trabajan en el hogares ajenos, comenzó a las 11.00 horas y se prolongó durante una hora, y en el que el silencio sólo fue roto cuando se leyó el siguiente comunicado:
«Desde 1988 se conmemora el Día Internacional de Trabajadoras del Hogar como iniciativa de la comunidad Latinoamericana. En Canarias no es un día muy conocido aunque sí es una realidad bastante extendida que afecta a muchas familias y personas trabajadoras.
Este año se quiere hacer visible una situación concreta: la de las trabajadoras del hogar que hacen tareas en régimen interno de cuidado a personas en situación de dependencia.
A finales del año 2011 el Gobierno Estatal empieza a paralizar las ayudas de la Ley de Dependencia, derivando en un abandono por parte de las administraciones públicas a las familias y personas en situación de dependencia. Por otro lado, en enero de 2012 se regulan algunos aspectos en materia de seguridad social y condiciones laborales y salariales, a través de la “ley de mejora de gestión y protección social en el Sistema Especial para Empleados de Hogar”.
Esto tiene las siguientes consecuencias:
1.- Las familias se ven forzadas a convertirse en empleadoras para conciliar la vida laboral y atender a sus familiares en situación de dependencia.
2.- Estas familias empleadoras, aun teniendo la voluntad, no disponen de los recursos necesarios para contratar a las trabajadoras de hogar respetando los derechos laborales recientemente reconocidos. ,
3.- Esto hace que existan muchas trabajadoras realizando tareas de cuidado a personas mayores en régimen interno en condiciones laborales y salariales muy precarias y en la más absoluta invisibilidad e indefensión.
Por todo esto pedimos:
1.- Que las administraciones públicas doten a las familias de los recursos humanos, materiales y/o económicos para poder abordar la atención a las personas en situación de dependencia.
2.- Que se articulen las medidas oportunas para garantizar el cumplimiento de la normativa y el respeto a los derechos laborales adquiridos y reconocidos recientemente a las trabajadoras de hogar.
3.- Y por último que deje de ponerse de manera exclusiva la responsabilidad del cumplimiento de esta normativa en cada familia empleadora.
¡¡Por un cuidado de calidad, trabajemos juntos en la defensa de los derechos laborales de las trabajadoras del hogar!!»
