El voluntariado cumple con una misión fundamental en el reparto de los recursos, además de acoger, escuchar y orientar junto con el personal técnico de Cáritas Diocesana de Canarias
«Todavía me sigue asombrando el gran compromiso que tiene el voluntariado y la sensibilidad y calidad humana que tiene cada uno y cada una», comenta Paula Moreno, responsable de los proyectos de ayudas que se ofrecen desde el área de Animación Comunitaria y Familia. Es te proyecto realiza el acompañamiento técnico a los Grupos de Cáritas Parroquial, que además de acoger, escuchar y orientar en los procesos de inclusión social, gestionan ayudas para las familias atendidas por Cáritas Diocesana de Canarias.
Durante el año 2022 se apoyó a las personas y familias acompañadas en más de 50 barrios de la provincia de Las Palmas con 14.932 tarjetas de supermercado. Esta iniciativa se lleva a cabo gracias a la financiación del Gobierno de Canarias, Cabildo de Gran Canaria y a la solidaridad de las comunidades parroquiales, socios y donantes de Cáritas Diocesana de Canarias, además de entidades privadas.
El personal técnico del área de Animación Comunitaria y Familia se reúne con regularidad con el voluntariado para hacer un uso lo más eficiente posible de los recursos con los que se cuenta, además de ser acompañados y asesorados para la mejora del acompañamiento que realizan a las familias.
